René Gómez se convirtió en el segundo imputado en declarar en el juicio que tiene por principal acusado al ex juez Federal de Orán, Raúl Reynoso, por el cobro de coimas para beneficiar a detenidos por narcotráfico.
Para ratificar su inocencia, Gómez solicitó declarar y responder preguntas de todas las partes y aprovechó para desmentir a su ex pareja R. R. V., quien en la audiencia pasada lo incriminó al decir que intermediaba en el pago de coimas de sus clientes al ex magistrado.
Gómez está implicado en una causa en la que los fiscales consideraron que el acusado de narco, Raúl Vera, pagó una coima con una finca de 700 hectáreas que primero estuvo a nombre de la ex pareja del abogado y luego fue adquirida por la imputada Rosalía Aparicio (hermana del empleado del Juzgado y también imputado, César Aparicio).
Según Gómez, la finca fue el pago de sus honorarios y la puso a nombre de su ex pareja como forma de dársela al hijo que tienen en común, y que luego la vendió al darse cuenta que no servía para la producción ni para construir un inmueble.
El imputado se refirió a su amistad con Reynoso y con otros jueces y justificó sus encuentros en vínculos de amistad y conocimiento producto de sus más de 45 años de profesión. También hizo mención a sus encuentros con su cliente Miguel Farfán, prófugo de la Justicia desde hace varios años y acusado de narcotráfico.
Luego de su extensa declaración, Gómez habló con LA GACETA para contar sus sensaciones y explicar algunos de los puntos salientes de su presentación.