Si por “amateur” se entiende al que hace algo por amor a esa actividad, el significado encaja perfectamente en aquellos que sienten al fútbol de los sábados con amigos o compañeros como algo prácticamente sagrado. Con el paso del tiempo, en Salta han ido proliferando los campeonatos y creciendo exponencialmente la cantidad de personas que los eligen.

Hasta hace un par de años, eran dos los torneos que habían copado la escena en la ciudad, casi monopolizando la actividad. El campeonato de los profesionales de La Loma y el de Confraternidad en San Luis llevan décadas instalados, desarrollándose y consolidándose.

Pero la oferta comenzó a crecer en los últimos años y, con ello, una competencia entre los organizadores por quedarse con más participantes y, como consecuencia, potenciarse en el negocio. En ese marco, cada competición busca ofrecer la mejor conjunción entre precio y beneficios para los jugadores con parámetros concretos como la calidad de los campos de juego, la capacidad de los árbitros, los premios, la seguridad, la cobertura médica, las instalaciones y venta de comida y bebida.

Este último ítem es de vital importancia debido a que en el fútbol amateur reina el espíritu social de personas que están dispuestas a pagar considerables sumas mensuales a cambio, no solo de jugar al fútbol, sino también de compartir tiempo antes y después de los partidos con los amigos. Los asados, las bebidas y hasta la música, son ingredientes indispensables de un cóctel irremplazable para los muchachos.

Pero como buenos amantes del deporte, quienes participan en los torneos son animales competitivos y buscan el mejor nivel posible. La competitividad es uno de las características que destacan a los campeonatos. Los 50 años de La Loma y los más de 15 de Confraternidad los han convertido en los incuestionables íconos del fútbol amateur, aunque cada uno con características propias.

Con el limitante de la exigencia de un título universitario, los profesionales de La Loma difícilmente cuenten con jugadores menores de 25 años -algo frecuente en San Luis- mientras que contiene categorías senior y súper seniors para los más grandes. Ambas cuestiones hacen, inevitablemente, que exista una diferencia física, de ritmo e intensidad de juego a favor de Confraternidad, que incluso cuenta con muchos ex jugadores profesionales o que actualmente juegan en los clubes del Torneo Anual de la Liga Salteña de Fútbol.

Para compensar eso, los equipos de La Loma evidencian un grado de organización más desarrollado: todos tienen un director técnico (en la mayoría de los casos los jugadores pagan un extra por mes para pagarle un sueldo a los entrenadores), que no solo los dirigen los sábados sino que los entrenan una o dos veces durante la semana, tanto en lo físico como en lo futbolístico. Esto, en San Luis no sucede.

En La Loma, después de jugar, siempre hay tiempo para un asado.

Apareció la competencia

El primero en aparecer como el tercero en discordia fue el torneo Fanáticos, que se disputa en el predio ubicado a la altura del kilómetro 5 de la ruta 26, conocida como “Camino a la Isla”. Logró un rápido crecimiento al albergar no solo a aquellos que no jugaban los otros campeonatos, sino también a los que por algún motivo, quisieron cambiar de aire.

“Fanáticos es una Sociedad de Responsabilidad Limitada con el objetivo del desarrollo de actividades deportivas y socioculturales cuya misión es proporcionar infraestructura de la mejor calidad posible para que las personas, a precio módico, practiquen deporte y desarrollen otras actividades”, contó a LA GACETA, el organizador Marcelo Cil. Comentó también que “todos los socios disponen de las instalaciones para eventos como cumpleaños, casamientos o comuniones al 50% del costo habitual”.

Ofrecer las facilidades de tener varias canchas de césped de las dimensiones necesarias para la práctica del fútbol de 11 es, sin duda, lo más complejo, debido a las hectáreas necesarias y al costo que implica su mantenimiento y cuidado.

Con este desafío irrumpió en la escena el Torneo Amistad Salta que se disputa en el predio que tiene en club Gimnasia y Tiro en Limache, donde juegan las divisiones inferiores del club y en el sector que antes ocupaba el rugby de la institución, que ahora tiene un predio propio en la circunvalación oeste.

El presidente de la subcomisión de fútbol del Albo y organizador del campeonato, Juan Carlos Ibire, contó que “con lo recaudado se subvenciona prácticamente todo el presupuesto de inferiores de nuestra institución”, lo que implica un negocio redondo para el club. Cada tanto, algún partido incluso se disputa en el estadio Gigante del Norte.

El último en sumarse fue el Torneo UFA, que se desarrolla en unas canchas ubicadas por la circunvalación oeste, cerca del predio de Confraternidad. Comenzó a jugarse este año y su origen responde a un popular campeonato de idénticas características que se juega en Córdoba.

De hecho, en 2011, el campeón cordobés vino a Salta para jugar un partido frente al campeón de la zona “A” del torneo Confraternidad, duelo que vio como triunfador a los salteños de Argentinos Juniors.  

Las características de cada uno

Los Profesionales de La Loma

El presidente de la Asociación Cultural y Deportiva de Profesionales Universitarios de Salta (ACDPUS), Rodrigo Martínez, valoró el trabajo realizado durante de 50 años y lo definió como el lugar para confraternizar con los profesionales. “Es un ámbito donde se prioriza el tercer tiempo; los médicos, los abogados, los ingenieros, se ponen los cortos para jugar un rato, donde se despunta el vicio futbolero y se come un asado con los compañeros”. La cuota mensual de asociado es de $700.

En cuanto al formato del campeonato, se divide en tres categorías libres (A, B y C), con 20 equipos en cada una, la Zona Senior (para mayores de 40 años) con 16 equipos y la Súper Seniors ( para hombres de más de 50) con 12 equipos. En total son 88 equipos.

La ACDPUS cuenta con 1.800 socios activos repartidos en 88 equipos, pero como la pasión es tan grande, ya hay pedidos para crear una categoría Maxi Seniors.

El predio tiene 52 hectáreas, con ocho canchas de futbol 11 de medidas reglamentarias y además existe un convenio con el Colegio de Abogados para utilizar el campo de juego que tienen en su predio. En total son 9 canchas.

En octubre se incorporó el fútbol femenino con siete equipos de fútbol 9, siendo una prueba piloto que promete quedarse. “Tenemos pileta de natación, escuelitas de golf y de fútbol social con los chicos del barrio”, agregó. 

Confraternidad

Matías Tabera Saravia, es el principal organizador del certamen que se diputa en el predio propiedad de su familia. “Lo que quisimos hacer es un espacio para compartir con amigos y familiares, por eso repudiamos cualquier tipo de agresiones y somos muy rigurosos con la conducta dentro y fuera de la cancha”, remarcó en diálogo con LA GACETA. El predio cuenta con baños con duchas de agua caliente, quincho cerrado con televisión y asadores.

Allí se disputa el tradicional campeonato que se juega durante la tarde, desde las 13, en el que hay cuatro categorías (A, B, C y D). Las tres primeras se juega en seis canchas de fútbol 11 y la D en la única de fútbol 9. El impecable estado de los campos de juego es, sin lugar a dudas, la mayor virtud del torneo y cuenta con excelente calificación a nivel nacional.

Comprende un total de 70 equipos integrados, en promedio, por 17 jugadores, es decir, alrededor de 1200 personas en total. Se juega un torneo de 19 fechas por semestre. “Tenemos 14 árbitros nacionales y trabajamos aplicando el reglamento de AFA”, resaltó Tabera.

El pago se hace por jugador y por semestre. El valor este año fue de $660 de inscripción y luego cuatro cuotas mensuales del mismo valor. El precio comprende la presencia de médicos y una ambulancia los sábados y la cobertura de un seguro médico ante lesiones.

Confraternidad lanzó en los últimos años otro torneo que se juega en el mismo lugar pero durante la mañana, entre las 9 y las 12, bajo el mismo esquema de competencia, arbitrajes y coberturas médicas. Cuenta con una sola categoría de 12 equipos generalmente compuestos por alrededor de 17 jugadores, que hacen un total de más de 200 participantes. Se paga $300 por jugador de inscripción y cuatro cuotas mensuales de $560.

Fanáticos

El predio cuenta con cuatro canchas de fútbol 11 de césped natural, cercado perimetral, para pelotas, riego por aspersión, banco de suplentes y ambulancias. También hay una cancha de fútbol 11 de césped sintético iluminada para jugar de noche.

Además hay dos vestuarios (femenino y masculino) con duchas de agua caliente, quincho con seis asadores, bar, baños, un salón vidriado de 280 metros cuadrados y una terraza de idénticas dimensiones con vista panorámica hacia todo el predio.

Se disputa en cuatro zonas de entre ocho y nueve equipos cada una con un total de 33 equipos que deben tener por lo menos 14 jugadores cada uno, de modo que por lo menos participan 462 jugadores.

Este año cada equipo pagó una inscripción de $2800 (unos 200 por jugador) y luego cada participante debía abonar una cuota mensual de $550. Para el año que viene el sistema se modificaría y cada jugador deberá pagar una inscripción (que podría rondar los $1000) y luego pagar $100 por partido.

“Este año lanzamos un torneo de fútbol femenino y en enero de 2018 organizaremos un campeonato de verano de fútbol 9 por la noche durante la semana en la cancha sintética y los sábados uno de futbol 11”, adelantó Cil y agregó que evalúan iniciar también un torneo senior para mayores de 40 años.

Torneo Amistad Salta

Se juega en una sola categoría con 26 equipos que deben contar con un mínimo 15 jugadores en la lista de buena fe, quienes abonan una cuota mensual de $400. Son más de 400 los jugadores que participan. Se disputa en tres canchas.

Torneo UFA

En este campeonato por el momento existe una sola categoría compuesta por 16 equipos que, en promedio, registran 18 jugadores en sus listas de buena fe, totalizando unas 300 personas.

Para participar, cada equipo debe pagar una inscripción de $2000 y luego los jugadores abonan individualmente cuotas mensuales de $450. El predio cuenta con dos canchas de césped natural y medidas reglamentarias.