Pasadas las 11 se entregó Manuel Alejandro Segovia, el último preso que estaba prófugo desde el jueves pasado cuando junto a 13 hombres más escapó de la comisaría 42 aprovechando un corte de luz.
Acompañado de su abogado y luego de haber coordinado la entrega con el jefe de la comisaría, el joven de 19 años se presentó en la Unidad Regional 4 y quedó a disposición de la Justicia.
De esta manera la Policía logró recapturar a todos los internos y la paz retornó a Tartagal.
Fuentes policiales confirmaron a LA GACETA que los 14 presos fueron redistribuidos en diferentes comisarias de la zona y quienes la comparten lo hacen en distintas celdas.